Su presentación fue un fluir de emociones desde mucho antes de comenzar, porque me ha conmovido profundamente su logro, que no tiene que ver con la mera edición, sino con la intensidad con que logra expresar, en tres líneas, su propia conmoción ante la vida, la Naturaleza, la luz, la lluvia, el aire.... y el agua.
"El sonido del agua" que da título a su trabajo, cobra sentido en cada átomo de Universo que Juan logra traducir en haikus. Puede entonces el lector dejarse llevar por cada imagen y generar un espacio propio, a partir de ese sonido que capta su sensibilidad de haijin.
Mientras veíamos ese vídeo, a mi lado, mi marido me decía: ¿cómo no escribir haikus con esas imágenes? y pienso en el privilegio de esas coordenadas que envuelven a Albacete en un microcosmos de sensibilidad, de especiales efectos que se diseminan en tantas instantáneas que los ojos son incapaces de retener la belleza, pero ésta se queda precipitando en oleadas dentro del alma.
Al terminar, mientras la música de fondo seguía invitándome a recordar Albacete, Chinchilla, el huerto, los cerezos y sus cerezas, escribí un poema, pensé que estar allí era un enorme privilegio. Y lo agradezco....
Elijo, de todo su trabajo, éste haiku que se ha quedado en mí como un eco eterno....
pequeña presa:
el sonido del agua
lo llena todo
(Juan Carlos Moreno)
el sonido del agua
lo llena todo
(Juan Carlos Moreno)
Gracias, Compi, por compartir con nosotros, en la presentación de tu libro en Valencia, tu creatividad y tu espíritu sensible.
Asami