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Para H. Cartier Bresson, en cada fotografía se imprime la decisión del ojo.

Como en una fotografía, en Haiku se imprime la decisión de la palabra para describir lo eterno. Sean bienvenidos a ésta parcela de mundo en la que vamos dejando, como huellas, nuestros.... instantes eternos.

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(Cuando cambia la mirada, cambia también el horizonte. Se ensancha, se amplía, tomamos conciencia de nuestra pequeñez. Es entonces cuando podemos vislumbrar a cabalidad que no estamos solos, que la presencia de otros nos enriquece y nos eleva.
Podrán leer en éste espacio a algunos amigos que comparten el gusto por la poesía japonesa, con quienes intercambio, crezco, aprendo y me proyecto.
....)

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Según Vicente Haya, "nuestros haikus no deben tener otra pretensión que ser la palabra que acompaña a nuestra ignorancia. La palabra de un caminante que no sabe dónde está su meta... Ahí está la fertilidad salvaje del haiku. El haiku es una selva que nunca se termina de recorrer, en extensión, en profundidad… Cuando has acabado la selva de fuera, te queda la selva de dentro."

Invitados quedáis, pues..... al final de la página encontraréis una lista de reproducción que, si deseáis, os puede acompañar en el recorrido..... gracias por vuestra presencia.



lunes, 18 de julio de 2011

                                       


                                        Matas quemadas,
                                        sus capullos efímeros
                                        cuelga la nieve.
                                       



5 comentarios:

  1. Muy bueno! me he quedado impresionada por la imagen que se me viene a la mente.

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  2. Aprecio mucho tu comentario, Verónica, y tu grata visita a este rinconcito de "Instantes".
    Es halagüeño saber que en el otro extremo del puente, que el haiku procura establecer, hay alguien que nos sonríe y nos saluda.

    Muchas gracias, amiga.

    Un beso.

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  3. Mi querido amigo, en cada instante se eterniza el abrazo... nuestro pedacito de mundo se encuentra algo trémula... ya publicaré algunas cosas pero, sobre todo... intentaré renovar la apuesta a abrazarnos a través de haiku... un beso!

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  4. ¡Qué alegría me das, Adri!
    Que hayas reaparecido ya es el mejor de los abrazos.
    Gracias, como siempre y pese a todo, por estar allí, reanundando y reafirmando este lazo de afecto.
    Esta afinidad que el haiku promueve.

    Te deseo lo mejor.

    Un beso.

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