.
(Cuando cambia la mirada, cambia también el horizonte. Se ensancha, se amplía, tomamos conciencia de nuestra pequeñez. Es entonces cuando podemos vislumbrar a cabalidad que no estamos solos, que la presencia de otros nos enriquece y nos eleva.
Podrán leer en éste espacio a algunos amigos que comparten el gusto por la poesía japonesa, con quienes intercambio, crezco, aprendo y me proyecto.....)
.
Según Vicente Haya, "nuestros haikus no deben tener otra pretensión que ser la palabra que acompaña a nuestra ignorancia. La palabra de un caminante que no sabe dónde está su meta... Ahí está la fertilidad salvaje del haiku. El haiku es una selva que nunca se termina de recorrer, en extensión, en profundidad… Cuando has acabado la selva de fuera, te queda la selva de dentro."
Invitados quedáis, pues..... al final de la página encontraréis una lista de reproducción que, si deseáis, os puede acompañar en el recorrido..... gracias por vuestra presencia.
Precioso!
ResponderEliminarGracias, Gorka.
ResponderEliminarPor estos lares, los lapachos son los primeros en anunciar la primavera.
Me pareció que era motivo suficiente para compartir.
Un abrazo.
Hermoso, Juan Carlos. Un haiku pleno de contrastes.
ResponderEliminarGracias por compartir.
Gracias a ti, Ana, por pasar y detenerte.
ResponderEliminarEsta es una de las tantas fotografías que tomé. No puedo dejar de maravillarme, como cada año.
Creo que aquí en Córdoba deberíamos organizar nuestro propio "hanami"...
Un beso.